Page 94 - II Plan de Igualdad

Preocupante también el control a la que muchas jóvenes se ven abocadas con la fiscalización

de sus smartphones por sus parejas, que controlan sus horarios, uso o contenidos privados. No
son micromachismos, son nuevas formas de control machista y siempre hay alguna amiga que

nos lo cuenta. Añadamos que distintas generaciones se han sumado al uso de plataformas
microblogging y comparten en sus grupos, con total normalidad, contenidos machistas sin caer

en la cuenta; hombres pero también mujeres de mediana edad, que están contribuyendo al
fomento de la desigualdad reenviándose sandeces machistas.

Sin embargo, las TICs en sí mismas son una agente de igualdad que pueden empoderar a la
mujer a medida que el trabajo en el que se ocupa se aleja de la manufactura y se adentra en lo

tecnológico.

La cosa pública, es el mayor agente de igualdad. Proceso meritocrático por antonomasia, en las
mismas condiciones de acceso a la Administración la mujer toma la palabra. También, por otro

lado, es mediante el desarrollo de la función pública con el que se generan los servicios que
alivian a la mujer de distintas cargas que le imposibilitan la conciliación laboral-familiar-

personal. Pensemos, por ejemplo, en guarderías y residencias para la tercera edad públicas:
generan trabajo para la mujer y, además, representan unos servicios que acaban

contribuyendo en una mejora de la calidad de vida para la mujer al liberarla de una
responsabilidad familiar que asume tradicionalmente.

Un paso más. Unamos tecnología y gestión pública y construyamos un escenario en el que la

mujer pueda generar sus propias oportunidades. Catalicemos la innovación y conformemos
espacios de prosumición sorora.

Como la metáfora de las secuoyas gigantes que nos citaba hace años Marc Vidal, especialista

en nueva economía. Este inmenso árbol puede llegar a alcanzar los 85 metros de altura, sin
embargo, al contrario de lo que se podría pensar sobre la profundidad de sus raíces, estas son
bastantes superficiales. La secuoya genera una red de raíces de tal envergadura que se

confunden las unas con las otras y conforman una masa sostén de todos esos árboles en su

conjunto, corrigiendo incluso la malformación de algunos de ellos con el paso del tiempo.

Imaginemos una red de mujeres en Elda que puedan generar sus propias oportunidades con el

impulso de la tecnología y el de la administración pública, en un programa acelerador de la
innovación local en el que se hayan identificado las variables potenciales susceptibles de

desarrollo alternativo y se fomente la creación de programas que la misma sociedad y de
forma prosumidora, entiende que son los que se necesitan en un futuro al alcance de sus

II Plan Municipal de Igualdad de Oportunidades de Mujeres y Hombres de Elda
2017-2021

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