Page 92 - II Plan de Igualdad
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consciente de las oportunidades que han perdido muchas personas trabajando en la sombra,
oscureciendo su futuro.
Un razonamiento al respecto: una sensación en la mayoría de las personas que hemos
entrevistado es la de oportunidades perdidas. No es infrecuente que se responsabilice a la
administración local de todas las desdichas cuando la economía está en horas bajas. Pero
tampoco es infrecuente que determinadas administraciones públicas no hayan sabido
gestionar lo suficiente sus sectores productivos en el marco de una planificación estratégica
local que los optimizara y que tuviese en cuenta el desarrollo de distintas áreas alternativas e
innovadoras.
Admitimos que ese lenguaje es relativamente nuevo en el plano gubernamental: la
competencia. Y sin embargo en esta histórica etapa que vivimos podrían incorporarse con
mayor ahínco algunos vocablos económicos en la gestión pública. No se trata de suplantar ni
loar el funcionamiento de un ámbito, el privado, por encima del que se defiende y nos
compete, el público. Dadas las circunstancias sociales, políticas y económicas en Europa, en
España y en nuestras ciudades, se justifica una triangulación (lo pertinente del ámbito privado
adaptarlo a lo público), interacción y colaboración público-privada institucional que ofrezca
oportunidades de desarrollo local. Como por ejemplo el que aquí se necesita.
Un matiz importante que diferencia lo que hasta ahora se podrían entender como una simple
proposición para la interacción entre sectores económicos y administración pública es la
intención, el protagonismo y la finalidad misma de esta proposición. Hasta ahora se ha podido
escuchar a través del tiempo que la política era para ellos (refiriéndose a los ciudadanos),
luego esta afirmación dio lugar a la de la política es con ellos (continuando con los ciudadanos).
Queda en manos de quien gobierne esta ciudad que se evolucione hacia la premisa de que la
política la hace ella (la ciudadanía y con la mujer como protagonista).
Con una ciudadanía prosumidora habituada a producir y consumir sus mismos productos,
llamada millennial, centennial, generación Y, o como se le quiera denominar por franjas de
edad, no se puede pretender transformar o gestionar al margen de su modus operandi
habitual. Sobre todo, en lo relativo a las redes, donde se han acostumbrado a generar sus
propias expectativas y compartirlo como protagonistas.
II Plan Municipal de Igualdad de Oportunidades de Mujeres y Hombres de Elda
2017-2021
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