Page 101 - II Plan de Igualdad

10. EN POSITIVO DESDE LA IGUALDAD.

Lo que antes se podía entender como medidas exitosas para el fomento de la igualdad de
mujeres y hombres, hoy puede que la percepción social sobre las mismas no se comparta en su

totalidad.

Y es importante constatar qué medidas igualitarias tienen cabida en esta sociedad que ahora
nos ha tocado vivir, en qué medios las expresaremos, a qué personas y en qué periodos. Y

sobre todo cuáles son específicamente oportunas para las personas que habitan esta ciudad.

En las entrevistas ha habido, coincidiendo con la tendencia que expresan otras ciudades,
distintos grados de aceptación sobre las distintas medidas que la administración pública puede
incorporar a las políticas públicas para motivar la igualdad de oportunidades de mujeres y

hombres en su seno.

Habitualmente, las medidas que discriminan positivamente a la mujer suelen entenderse
mejor según la etapa temporal en la que se proponen o son implementadas. Así, la

discriminación positiva de la mujer por cuotas reservadas en las plazas a ocupar en la
administración pública o, menos probable, en organizaciones privadas, ha dejado

paulatinamente de compartirse con claridad, incluidos algunos colectivos progresistas y
aunque ahora mismo estén de actualidad mediática dadas las medidas del Consell.

Es decir, que exista un número determinado de puestos de trabajo reservado para mujeres

hoy no se considera tan legitimado socialmente. La respuesta a la falta de apoyos para este
tipo de discriminación en positivo puede venir dada por tres motivos: el primero es que

estamos en un nuevo tiempo en el que la mujer ha conseguido alcanzar algunas metas que, en
su día, años 70, eran inimaginables. El segundo que, dado lo logrado, entre las mujeres puede

existir la sensación de que a día de hoy pueden mirar de frente al hombre en distintos retos
como el que nos ocupa. El tercer motivo podría entenderse por el motivo de que en algunos

ámbitos laborales o representativos la igualdad se ha alcanzado (a veces confundida con
parcelas feminizadas poco igualitarias) y por lo tanto no caben procesos diferenciadores que

distingan cuotas representativas para distintos sexos.

Cuando se insiste en la importancia de que, por ejemplo, en las candidaturas de los partidos
políticos (representantes en asociaciones, entidades, organizaciones sociales…) no hay

demasiada igualdad y se pregunta entonces cómo se podría lograr que las personas que nos

II Plan Municipal de Igualdad de Oportunidades de Mujeres y Hombres de Elda
2017-2021

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