Page 79 - II Plan de Igualdad
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6.  CÓDIGOS Y LENGUAJE.




                  En el marco de cualquier investigación de estas características en ciudades con una población
                  similar a la de Elda, emerge de inmediato un asunto trascendental: la comunicación.


                  La  comunicación  en  un  doble  sentido.  El  primero  la  comunicación  desde  dentro  del  mismo

                  ayuntamiento y desde el ayuntamiento hacia la ciudadanía. El segundo la comunicación según
                  el ámbito de actuación, el contexto y el segmento poblacional a quien va dirigida la misma.


                  La  Administración  Pública  debe  compartir  en  sus  adentros  una  comunicación  inclusiva  para

                  trasladar  a  la  ciudadanía  un  lenguaje  igualitario  legitimado  desde  su  propio  hacer.  Y  de
                  comunicación  inclusiva  una  persona  no  se  impregna  como  si  de  comunicación  política  o
                  empresarial se tratara, la comunicación inclusiva se aprehende específicamente dado que, por

                  desgracia, pocas cosas motivan por sí solas su desarrollo.


                  Bien es cierto que las Administraciones Públicas han desarrollado bastante este campo a nivel
                  global en el último lustro, aunque en un plano más estético que en profundidad. Aun así, la

                  mayor parte de la documentación y comunicaciones que realizan los consistorios ha mejorado
                  suficientemente en lo que a lenguaje igualitario se refiere.


                  Ahora  bien,  pensemos  por  un  momento  el  contraste  entre  la  importancia  que  desde  la

                  Administración a día de hoy se le  concede  a la igualdad (o participación, o  transparencia o
                  gobierno abierto) y contrastémoslo con la importancia que le da una mayoría social. También,

                  reflexionemos sobre la actividad en pro de la igualdad que se ha desarrollado en la ciudad en
                  el último decenio para comprender el grado de adhesión ciudadana y de expresión igualitaria

                  que existe en estos momentos.

                  ¿Qué  desencaje  hay  entre  lo  institucional  y  lo  social,  entre  un  polo  y  otro?  Existe  una

                  importante brecha entre la política y la ciudadanía, cierto desinterés respecto a algunas áreas

                  gubernamentales, que no todas. Por ejemplo, pensando a la participación ciudadana de forma
                  presencial u online, imaginemos una fase de consulta sobre la peatonalización de una  calle
                  comercial del centro de la ciudad u otra sobre la posibilidad de anular una popular fiesta local.

                  Podemos  aventurar  una  alta  participación  sobre  el  censo  local,  sin  embargo,  en  aspectos

                  igualitarios la participación social es tan ligera como el ‘me gusta’ de Facebook.

                  Tal vez de eso se trata: la tecnología influye de muchas maneras, algunas dramáticas como

                  veremos más adelante. ¿Acaso podemos pensar que aplicaciones como Whatsapp, Facebook o

                          II Plan Municipal de Igualdad de Oportunidades de Mujeres y Hombres de Elda
                          2017-2021

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