Plaza de Arriba
El espacio urbano de la actual plaza de Arriba, situado en las afueras de la Elda islámica, estuvo ocupado parcialmente por un cementerio que se extendía desde la actual Casa Consistorial hasta las traseras de la calle Luis Buñuel. En esta necrópolis, probablemente originada en época almohade (siglos XII-XIII), se hallaron varias tumbas que seguían la tradición musulmana. En sus alrededores pudo situarse la sinagoga y la mezquita mayor o aljama, bien bajo la antigua iglesia de Santa Ana, o en el entorno de la plaza del Ángel o plaza de Abajo, actual plaza de la Constitución.
Su uso como una de las plazas de la villa de Elda no está claro, al menos, hasta la Edad Moderna, si bien la plaza de Arriba pudo ir conformándose como espacio público ya a finales de la Edad Media. Desde sus orígenes, la plaza estuvo comunicada con el castillo de Elda y palacio condal de los Coloma a través de la calle del Castillo o calle Empedrada. A lo largo del siglo XVII, tras la expulsión de los moriscos, esta plaza forma parte claramente de la trama urbana de la villa junto con la plaza del Ángel o plaza de Abajo. En el entorno de la plaza de Arriba se ubicaría el cementerio de los cristianos nuevos, el fosar de afuera, en el eje de entrada y salida de Elda por el portal de las Eras, así como algunas de las más señaladas calles (Comisario o Linares, Toril) y plazuelas de la antigua villa, como las de San Pascual y de la Iglesia.
Es probable que se celebraran encierros o corridas de toros en ocasiones o festividades especiales (Santa Ana o las Fiestas Mayores), como la que tuvo lugar el 15 de julio de 1624. Precisamente el callejón del Toril conserva en su nombre esa tradición. A medida que la villa fue creciendo, sobre todo ya durante el siglo XVIII, se van edificando viviendas alrededor de la plaza, como la casa-almazara que existía en el solar de la Aljafería, la sede de la comparsa de los Moros Realistas, o la casa de los Maestre, en la que murió el ilustre eldense Juan Sempere y Guarinos en 1830.
Todavía se conserva en la plaza el panel cerámico devocional del Santísimo Cristo del Vall, fechado a inicios del siglo XIX. Una plaza que, durante siglos, dispuso de fuente pública y fue un lugar dedicado al mercado diario, compartiendo ocasionalmente con la plaza de Abajo el mercado semanal (1426) y la feria anual (1466). Varias fotografías de inicios del siglo XX muestran el antiguo y llamativo puesto del pescado en la plaza.
La plaza de Arriba fue uno de los primeros lugares donde se proyectó cine en Elda, a inicios del siglo XX. En su subsuelo, todavía se conserva un refugio antiaéreo construido en 1938, durante la Guerra Civil. También se ubicó el Auxilio Social desde la posguerra, y ha albergado reconocidos negocios y comercios de la Elda tradicional. En las últimas décadas del siglo XX su configuración como plaza se fue diluyendo, al haberse efectuado operaciones de apertura y reforma de calles y plazas que modificaron profundamente su imagen secular.
La plaza históricamente ha recibido varios nombres: plaza de Arriba, plaza de Topete, plaza de Niceto Alcalá-Zamora, plaza de Juan Mollá, plaza de la Revolución Nacional Sindicalista y plaza del Sagrado Corazón de Jesús, entre las más destacadas.
Plaza de Topete (Elda. La película de los años 20)